Cerro cofre
- Aquí Comitán
- 14 may 2020
- 2 Min. de lectura
Retando al Cerro Cofre
Soñé subir al Cerro Cofre, ubicado en la ranchería El Naranjo, municipio de Chicomuselo, Chiapas.
Si soñé subirlo lo voy a subir. Es ya una obsesión. Voy a llegar a la cúspide del cerro.
Soñé que estaba del lado del barrio Cerro Cofre y me vi diciendo "desde aquí es mucho más fácil escalar".
Pero no. Yo lo voy a intentar desde El Naranjo. Estoy seguro de lograrlo, aunque creo que me va a tomar unos diez intentos o más, porque se necesita abrir caminos, explorar rutas.
No soy especialista, sino obcecado. Y si me toma más días igual lo voy a hacer.
Ese cerro se puede convertir en un espacio ecoturístico muy visitado y dejar buena derrama económica.
Con un poquito de difusión el cerro comenzará a ser escalado por los amantes del deporte extremo o, mínimo, de quienes aman el senderismo.
Pero ahí bien puede disfrutarse de la adrenalina del rappel. Quiero ver a un hombre descender en línea recta desde ese cerro.
La primera vez que alguien descienda en rappel desde lo más alto del Cerro Cofre van a llegar cientos, quizá miles de jóvenes, niños, mujeres y ancianos a presenciar el descenso.
Y así en cada ocasión que alguien rete las alturas.
Pero si el rappel no fuera muy viable se puede instalar una TIROLESA (o más de una), y disfrutar de esa actividad.
Los pobladores podrían conformar, de uno y otro lado del cerro, una o más Sociedades Cooperativas y así mejorar sustancialmente sus ingresos, aprovechando el flujo turístico.
-Sólo servir de GUÍA TURÍSTICO por las diferentes rutas sería una prestación de servicio que dejaría dinero.
-Vender COMIDA REGIONAL será gran negocio.
-Ofrecer SOUVENIRS .
-Ofrecer CABALLOS DE MONTA para los recorridos a quienes no puedan escalar.
-Los guías especialistas en RAPPEL también ganarían buen dinero.
-La TIROLESA deja harta paga.
Pero iniciar estos proyectos implica que alguien abra un primer sendero para llegar por primera vez a la cúspide del CERRO COFRE y yo quiero hacerlo.
Tengo la ventaja de no creer en El Juanón, como le dicen al demonio en mi tierra, Emiliano Zapata.
A mí El Cadejo me la Pellizca y a La Llorona la puedo dejar sonriendo.
¿Y la ya famosa Claudia? Como yo no tengo ninguna obsesión con ninguna mujer a mí no me puede engañar con sus multipersonalidades.
Como pueden ver, los turistas podrán escuchar muchas historias y muy bonitas en mi tierra.
Pero, insisto, ello ocupa de una primera visita a la cúspide del bello e imponente Cerro Cofre.
Texto e imagen de Disraeli E Ángel Cifuentes

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